BODEGA “EL CARACOL” ABIERTO POR FIESTAS DEL MEDIEVO DEL BARRIO DEL RABAL
Entrar en la bodega de «El Caracol» es como viajar a la Villena del siglo XVIII. A pesar de los calores del mediodía primaveral en este sótano, casi una cueva, hace frío. Posee todavía los elementos imprescindibles para hacer buen vino, bajas temperaturas, oscuridad y silencio.
La familia Marco fueron los promotores de rescatar la antigua bodega de su bisabuelo, situada en la parte baja del barrio del Rabal, el más antiguo de la ciudad.
